Dragon Age Inquisition es la tercera entrega del notable videojuego RPG creado por Bioware. Desarrollado con el motor Frostbite 3.0 de EA y con unas raíces clásicas de los mejores juegos de rol, el videojuego se ambienta en un mundo fantástico y medieval que depara a los jugadores horas y horas de entretenimiento rolero de espada y brujería.
Combates en tiempo real, cámara táctica, magnífica ambientación, enormes posibilidades de personalización y progresión, cooperativo y un mundo que se desarrolla en base a las decisiones del jugador, conforman este Dragon Age: Inquisition que para muchos jugadores es uno de los grandes referentes del rol occidental.